Trump o el poder más allá de la despolitización – Juan de Dios Andrade

CONfines Políticos

Con Donald Trump no se puede ser indiferente, o simpatizas con él o lo odias. Sin duda, posee una personalidad polarizante. Sin embargo, lo que está en juego es algo más que la simpatía por una figura pública. Trump, como ha pasado con otros personajes de la Historia, no es una anomalía de nuestro tiempo. Al contrario, es una de las consecuencias lógicas del momento que estamos viviendo y, ahora que ha sido absuelto del juicio político por segunda ocasión, se abre todo un abanico de claroscuros para el futuro de Estados Unidos…

Llevamos décadas testificando la formación de una ciudadanía que rechaza a la política y a los políticos, por considerarlos corruptos y despreciables. Es evidente que los hay y en número creciente, pero no todos los que se desarrollan en lo político viven corruptamente. Mas la opinión pública imperante descalifica a todos por igual, generándose una serie de espacios para la participación por fuera de la democracia, haciendo frontera con el populismo autoritario…

En cierto modo, es lo que Nicolas Tenzer llamó La sociedad despolitizada, pero ahora debe ser entendida dentro de la era global. El populismo autoritario se ha globalizado de la mano de la despolitización y pretende mantener aglutinados a todos los inconformes con los globalistas, para retornar al poder en la siguiente elección. Parece un juego de palabras, pero no lo es…

Aunado a lo anterior, presenciamos los efectos de la eliminación de las materias formativas en el currículum académico, en aras de la eficacia, la eficiencia, la tecnificación y comercialización del conocimiento. No quiero decir que eso sea malo a priori, sino que olvidamos formarnos para vivir en democracia. La vida, especialmente la política democrática, no se debe reducir en las escuelas y universidades a navegar por los mapas tecnocientíficos o administrativos…

Las causas de la corrupción son varias y no son privativas de la democracia. En los sistemas autoritarios también existe y mucha. El abandono de la formación en el ámbito educativo es uno de los detonantes de la corrupción y de la despolitización al mismo tiempo. Esto es lo que aprovechó Donald Trump: el hartazgo ciudadano que se decantó por un deseo ferviente de cambio a ultranza en la elección que lo llevó al poder. Por eso digo que Donald Trump es una de las consecuencias lógicas de nuestro tiempo…

Ha comenzado la lucha por el poder

Al ser absuelto por segunda ocasión en un juicio político, Trump afirmó que su movimiento patriótico “acababa de comenzar”. Los senadores demócratas sólo pudieron obtener 7 votos republicanos de los 17 que necesitaban para alcanzar los 2/3 necesarios para enjuiciarlo. Era de esperarse: en poco menos de dos años habrá elecciones intermedias y los republicanos saben que podrían perder escaños a manos de la fuerza territorial regional del trumpismo. Por eso era impensable que los demócratas pudiesen convencer a más senadores republicanos, lo que de paso explica el que Trump se negase a testificar. No se iba a llegar a ese punto. Biden y los demócratas se habían mentido en un callejón sin salida y la posición política de Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes, había quedado en una posición comprometida y su reacción no podía ser de otra manera: llamó ‘cobardes’ a los senadores que se negaron a enjuiciar al expresidente…

Biden tenía que decidir entre desgastarse en una batalla perdida o darle salida rápida al juicio fallido para enfocarse en sacar adelante la votación de sus proyectos. Entre ellos, la reactivación económica y la asistencia social. No había mayor margen. Querían enjuiciarlo para inhabilitarlo en 2024 y fallaron…

Aunque queda mucho por delante, podrían ser malas noticias para Joe Biden. En el escenario geopolítico, enfrenta varios retos muy complicados, entre ellos el desafío de la alianza militar entre China, Rusia e Irán. Internamente, lo ocurrido ya se interpreta como una derrota ante Donald Trump, que pretende enfilarse a nominarse nuevamente en 2024 y sus seguidores recobrarán el ánimo perdido por el resultado electoral…

Ciertamente la apuesta de la Casa Blanca parece centrarse en que se reformule el equilibrio de fuerzas al interior del Partido Republicano, en lo que será clave el papel que juegue el senador republicano Mitch McConnell, pero Biden no debe olvidar que la posición del propio senador estará en juego y, a estas alturas, Donald Trump ya sabe que debe descarrilar al senador por Kentucky. El 8 de noviembre de 2022 se votarán 34 de los 100 senadores, entre ellos el escaño de McConnell, lo que explica por qué apoyó el segundo juicio político y luego votó en contra, para finalmente afirmar que Trump era responsable de lo ocurrido en el Capitolio….

Trump, la ruptura que viene

El escenario rumbo a las elecciones de 2022 y de 2024, se anticipa complicado. Las principales variables se nos presentan como interdependientes, pero está claro que el expresidente apostará a acentuar la despolitización para recuperar el poder. El círculo cercano a Biden confía en que los republicanos neutralizarán a Trump o desembocarán en una ruptura que los debilite, sobre todo por la posibilidad de que el magnate funde un nuevo partido y sobrevenga la fractura…

Será un juego de alta velocidad. Cual espada de Damocles, Trump blandirá el proyecto de partido para obligar a los republicanos a nominarlo otra vez, ante el riesgo de ser desfondados o, en caso de negarse, proceder a desmantelar al Partido Republicano.  De hecho, ya hay un forcejeo entre fuerzas centrípetas y centrífugas. Además del recurso a la despolitización, Donald Trump tiene puesta su esperanza en algo que los propios demócratas temen: que Joe Biden no sea capaz de resolver los problemas más acuciantes de Estados Unidos: pandemia, el servicio médico y la recesión económica…

Biden ganó sin realizar una campaña brillante y no faltan los que creen que su triunfo se debió más a los errores de Trump que a los aciertos del hoy presidente…

En otro carril, viene desarrollándose el proyecto del ‘Gran Reset’, lanzado por el Foro Económico Mundial, celebrado recientemente en Davos. ¿Podrá Joe Biden con semejantes desafíos internos y externos? Vamos a ver…

Es esta convergencia entre despolitización y populismo autoritario lo que hace que ambas cosas deban ser reinterpretadas. Está surgiendo un nuevo tipo de poder…

Hasta entonces…

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