Una sucesión presidencial eminentemente pragmática – Juan de Dios Andrade
El próximo 2 de junio, habrá elecciones concurrentes en México. Es mucho lo que está en juego: Presidencia de la República, Congreso de la Unión, gubernaturas, poderes legislativos locales y alcaldías. Cada una tiene su propio escenario, pero son las dos primeras las que acaparan más atención. Si nos atenemos a que una elección se gana con votos, debemos admitir que la sucesión presidencial es eminentemente pragmática. ¿Qué significa eso? Si respondemos acertadamente, aumentarán sustancialmente las posibilidades de ganar.