La guerra secreta de Trump – Juan de Dios Andrade
Las implicaciones de la eliminación de Soleimani parecen ser más complejas de lo pensado. ¿Cuáles serán sus repercusiones en América?
CONfines Políticos
Las cosas están claras. Mark Esper, jefe del Pentágono, dijo carecer de pruebas sobre algún plan de Qasem Soleimani para atacar embajadas de Estados Unidos, pero reconoció que quizá sí a la que tienen en Irán. Esto nos deja dos posibles motivos para eliminar a Soleimani: objetivos geoestratégicos en Eurasia o en otra parte del mundo (América Latina), o usar un elemento distractor ante la presión del juicio político contra Trump…
Aunque no son excluyentes, la segunda posibilidad parece baladí y un juego muy peligroso al tratar de desbordar una coyuntura complicada en el escenario de la reelección. Porque eso habría sido al colocar a Estados Unidos en ruta de confrontación armada o exponerlo a una reformulación de las redes del terrorismo. Donald Trump habría mostrado al mundo su faceta más superficial…
Para nadie es un secreto que la base de la élite iraní en el poder viene deteriorándose y las protestas por el derribo del avión ucraniano y por la negativa, en primera instancia, a reconocer toda responsabilidad en ello, son una muestra irrefutable. ¿Qué caso tenía eliminar a Soleimani si eso pudiera fortalecer a la cuestionada élite gobernante? O se trató de una estupidez o estamos ante una estrategia geopolítica genial…
De entrada, pareció que el nacionalismo islamista reverdecía, pero el derribo del avión cambió el escenario, dando pie a las airadas protestas al interior de Irán…
El juego de Putin
Es evidente que la desaparición de Soleimani desarticula la estrategia geopolítica iraní y estropea la de Rusia. Vladimir Putin jamás se dejaría arrastrar por un aliado a una guerra con Estados Unidos e Irán quedó solo frente a Trump. No podía ser de otro modo: tendría que haber algún tipo de respuesta iraní, pero no al grado de ir directamente a una conflagración, porque Putin tampoco querría a su ducto de gas natural en medio de una confrontación bélica…
Para Rusia, surtir gas natural a Europa y Estados Unidos es vital para su economía. Jamás pondría eso en riesgo secundando a Irán. Claro que garantizar que no habrá ataques terroristas en el futuro, es otra cosa y no necesariamente orquestado por los iraníes. Cabe recordar que nunca faltan los espontáneos…
Sin embargo, jugar a la desestabilización geopolítica podría tener un precio muy alto y no se puede asegurar que no vaya a ocurrir una guerra en la zona…
Pero lo que sí es un hecho es que la muerte de Soleimani generó un enorme vacío geopolítico en el Medio Oriente y, por lo pronto, obliga a la élite en el poder a concentrarse dentro de Irán para tratar de mantenerse en el poder. Pero eso no será para siempre. Es un asunto de supervivencia y habrá que ver cómo lo piensan resolver…
Asimismo, en política no hay vacíos de poder por mucho tiempo. Alguien intentará llenarlo y el golpe frontal a Irán habilita a dos jugadores locales: Turquía y Arabia Saudita. Ambos saben el precio puesto por Trump: mantenerse alejados de la esfera de influencia rusa y china…
Ahora Putin está obligado a sostener a los al-Assad en Siria y a estabilizar de inmediato a Libia. ¿Calculó bien Trump la posibilidad de un relanzamiento del Estado Islámico, sobre todo en Siria? Esto implica acelerar su desmantelamiento y apoyar con todo el retorno de terroristas a sus lugares de origen, cosa que ya está ocurriendo. Por lo pronto, en Libia, la situación condujo a que los acérrimos enemigos: el mariscal Jalifa Haftar y Fayez al Sarraj, jefe de gobierno, aceptaran firmar un alto al fuego en Moscú. Esto gracias a la intervención de Rusia y de Turquía. Sin embargo, fracasó: de último momento, Jalifa Hafter se marchó de Moscú sin firmar el documento…
Los mensajes
En el contexto mediático, pareció que alguien estaba enviando mensajes sobre todo a través de CNN, la BBC y The Wall Street Journal, así como desde algunos ‘tanques de pensamiento’. De una crítica frontal a Trump, pasaron a enfocar a América Latina y a México…
El entramado revela los presuntos planes de Irán (entiéndase: ‘Soleimani’) como eje de gobiernos y dictaduras populistas en América. Eliminar a Qasam tendría como uno de sus objetivos echar abajo dicho proyecto. En otro aspecto, Trump habría estado afianzando el papel de Brasil porque el gran socio de Irán en Latinoamérica no es ni Venezuela, ni Cuba o Nicaragua, sino los brasileños. Hasta ahora, Irán ha logrado mantener separados sus intereses políticos de los económicos. Pero ¿por cuánto tiempo más? Ir a una guerra frontal con Estados Unidos en Medio Oriente, pondría en riesgo su relación con Brasil en América…
El juego geopolítico populista se asentó en tres ejes externos: China, como variable comercial y financiera; Irán, maniobrando a dos manos (como socio y como extremista ideológico, según sea el caso) y Rusia consolidándose como fiel de la balanza, lo que de facto desplazaría a Estados Unidos como tal. En ese mismo escenario, el vicepresidente Mike Pence habló de un presunto plan de Soleimani para asesinar al embajador saudita en Estados Unidos, recurriendo a un cártel mexicano. ¿Fue un mensaje de Trump a los intereses de la delincuencia organizada en América Latina y Medio Oriente? Pareciera que, en el mismo sentido, se publicó el artículo: El terror de Soleimani en América Latina en The Wall Street Journal, firmado por Mary Anastasia O’Grady…
Se trata de un artículo audaz e interesante. La muerte de Soleimani sería una mala noticia para Cuba, las FARC de Colombia y Venezuela, principalmente, así como para las redes tejidas por él en Argentina, Brasil, Perú, El Salvador y México. Las Quds que dirigía Qasam Soleimani estarían detrás del tráfico de armas y la exportación del terrorismo. Soleimani no habría sido el iniciador del proyecto, pero sí el hombre que se encaminaba a consolidarlo…
La trama, según O’Grady, condujo al atentado en Argentina en 1992 y al asesinato de Nisman, quien habría descubierto que el gobierno argentino encubrió la participación iraní. En el caso venezolano, la columnista señala a Tareck Zaidan El Aissami Maddah como el personaje clave de las relaciones con Irán. Y así como algunos protestaron y respaldaron lo hecho por Soleimani, otros han guardado un silencio elocuente: El Aissami, Daniel Ortega, Evo Morales. O’Grady dice que una fuente de Inteligencia le hizo saber que Soleimani inició una estrategia de acercamiento con Andrés Manuel López Obrador, al asumir el poder…
¿Tendrá relación la detención de Genaro García Luna? Vamos a ver hasta dónde llegan las cosas…
Las palabras de Mary Anastasia O’Grady son puntuales y directas: “El fin de la mente maestra del terrorismo es un mensaje para aquellos en la región que albergan sus redes”. Por si había alguna duda, claro…
El asunto dista mucho de ser una simple estratagema para distraer del juicio político y lograr la reelección…
Lo que inquieta es que algunos de los que asesoran a Donald Trump no son especialistas ni en geoestrategia militar ni en conflictos de baja intensidad, y no olvidemos que, así como Soleimani usó a las Quds para operaciones especiales fuera de Irán, Putin ha hecho lo mismo con el enigmático grupo Wagner…
Hasta entonces…
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