Vie. Nov 22nd, 2024

La disputa por el dominio del océano Índico y el Pacífico – Juan de Dios Andrade

Dado a conocer el pacto militar Aukus, ¿podrá no sólo contener a China sino sentarla a negociar con el eje anglosajón y sus aliados en la región? En el océano Índico y Pacífico se está decidiendo cuál potencia prevalecerá en Eurasia y podrá liderar al siglo XXI.

CONfines Políticos

¿Quién se convertirá en una potencia? ¿El que domine tierra firme o el que domine los mares? ¿Potencia terrestre o potencia marítima? ¿Telurocracia o talasocracia? Esa ha sido la disputa entre las corrientes geopolíticas que abrevan en Mackinder y en Spykman, respectivamente. Por si no fuese suficiente, habría que agregar que, hoy, está en juego el poder y el liderazgo global, y los principales aspirantes hacen maniobras en tierra, aire y mar, además de los proyectos espaciales que abren un campo nuevo para la Geopolítica…

Tanto en el momento presente como en el pasado, son esas tensiones las que han puesto al mundo o a una parte de él al borde de la guerra o han desembocado en ella…

La reciente difusión del pacto militar Aukus (Acrónimo: Australia, United Kingdom, United States), para contrarrestar a China en el Indo-Pacífico, ha hecho resurgir los temores de que las potencias caigan en la llamada ‘trampa de Tucídides’…

El Peloponeso global

Cuando Tucídides escribió sobre las guerras del Peloponeso, hizo énfasis en lo que pasa cuando una potencia establecida (Esparta) se ve amenazada por una potencia emergente (Atenas). Para el ateniense, que es considerado el padre de la Historiografía científica, el desenlace se decidirá mediante la guerra. Desde entonces, la incógnita que ha inquietado a la Humanidad es si tal resultado será siempre inevitable…

Es verdad que muchos ejemplos históricos avalan la apreciación de Tucídides, pero también lo es el que no siempre ha sido así. La Guerra Fría es muestra de ello. Pese a todo, el pensamiento del ateniense no deja de ser importante, pues su enfoque no proviene de principios justos ni éticos sino del poder y de los hechos. El pensamiento de Tucídides es una muestra clara de realpolitik, de una política basada sólo en consideraciones de poder…

Graham Allison

Ya en nuestros días, Graham Allison ha expuesto la ‘trampa de Tucídides’ diciendo que la gran cuestión de nuestra generación estriba en si la guerra entre Estados Unidos y China podrá evitarse o si el mundo entrará de lleno en una tercera gran guerra, ahora de carácter global…

¿Imperarán los criterios bélicos o prevalecerán los motivos racionales de autopreservación? Los efectos de una guerra nuclear serían incalculables y habrá que ver si los contendientes estarán dispuestos a llegar hasta las últimas consecuencias…

Corría el año de 1946, cuando George F. Kennan envió un telegrama desde Moscú, que hoy es muy famoso y en el cual expuso lo que pronto sería conocido como la ‘teoría de la contención’. A partir del gobierno de Harry S. Truman, se adoptó dicha estrategia de ‘encapsulamiento’ del comunismo con tal de evitar su expansión mundial y, aunque son innegable algunos de sus logros, lo cierto es que la contención rara vez ha logrado contener las ideas, pero, eso sí, ha significado una fuerte sangría financiera para Estados Unidos…

El Indo-Pacífico y las regiones Asia-Pacífico

La teoría de la contención

Cuando se dio a conocer el Proyecto Reconstruyendo las Defensas de América, impulsado por el ‘taque de pensamiento’[1] La Nueva Centuria Americana, fue evidente que se basaba en una reinterpretación de la teoría de la contención que acercaba al mundo a una guerra a escala global. Pero, además, implicaba un error de interpretación: suponía que el escenario geopolítico del siglo XXI se decidiría mediante una confrontación contra el terrorismo centrada en el Medio Oriente…

Desde ese punto de vista, la reciente salida de Afganistán es lógica, aunque negativa para efectos de la difusión de la democracia. La experiencia histórica ha demostrado que lo que realmente detiene al totalitarismo y al autoritarismo es más libertad y más democracia…

En todo caso, quizás lo mejor sea una estrategia basada en la contención y en la participación democrática. De otro modo, tarde o temprano tendríamos que elegir entre Telurocracia y Talasocracia. ¿Poder terrestre o poder marítimo? Esa sería la cuestión, pero la realidad global es mucho más compleja que esa disyuntiva…

Zbigniew Brzezinski

Hillary Clinton o la impronta de Brzezinski

En la edición noviembre/diciembre de 1997, Foreign Affairs publicó un avance de lo que en breve sería otro de los libros más célebres de Zbigniew Brzezinski: El gran tablero mundial[2], bajo el título: Una estrategia para Eurasia. Desde el principio, el que fuera asesor de seguridad nacional de Jimmy Carter, afirmó: “Eurasia es el supercontinente eje del mundo. Una potencia que dominara Eurasia ejercería una influencia decisiva sobre dos de las tres regiones económicas más productivas del mundo: Europa occidental y Asia oriental. Un vistazo sobre el mapa da a entender también que un país dominante en Eurasia controlaría casi automáticamente Oriente Próximo y África”. Ya en el libro, Brzezinski insistió en que había terminado la era de una potencia global…

Desde aquel momento, quedó claro que una cosa era la potencia que dominase en Eurasia y otra la pretensión de una potencia global. La clave estaba en determinar con precisión cómo se podría dominar en Eurasia, lo que equivalía a decir que no siempre sería de la misma manera…

Hillary Clinton

Cuando en 2011, Hillary Clinton publicó, siguiendo las directrices de Brzezinski, su artículo: Siglo del Pacífico de América[3], sostuvo: “A medida que la guerra en Irak termina y Estados Unidos comienza a retirar sus fuerzas de Afganistán, Estados Unidos se encuentra en un punto de inflexión. (…) Asia-Pacífico se ha convertido en un impulsor clave de la política global. Extendiéndose desde el subcontinente indio hasta las costas occidentales de las Américas, la región se extiende por dos océanos, el Pacífico y el Índico, que están cada vez más vinculados por el transporte marítimo y la estrategia”. Luego de rechazar las presiones para centrarse en los imperativos de la política doméstica y afirmar que Estados Unidos es una potencia tanto del Atlántico como del Pacífico, agregó: “A medida que generamos confianza juntos, nos comprometemos a trabajar con China para abordar problemas críticos de seguridad regional y global”. Y remató: “El futuro de la política se decidirá en Asia, no en Afganistán o Irak, y Estados Unidos estará justo en el centro de la acción”. Más claro, ni el agua…

¿Cómo fue que Estados Unidos llegó de los acuerdos estratégicos con China al ‘China enemiga’? La principal explicación está en el gobierno de Donald Trump. Si es que hubo una intromisión de Rusia en aquellas elecciones, fue para propiciar la ruptura entre Estados Unidos y China mediante el autoritarismo de Trump. Es verdad que Trump tuvo razón en muchas cosas, pero también cometió muchos desatinos…

Como sea, Zbigniew Brzezinski nunca estuvo seguro de que las intromisiones rusas fuesen la causa de la derrota de Hillary Clinton sino los errores estratégicos cometidos durante la campaña…

Los mensajes del comodoro

Las intenciones chinas de apoderarse del Indo-Pacífico son evidentes y, en general, de todo el sudeste asiático hasta bordear con el eje anglosajón. Para nadie es un secreto el deterioro de las relaciones entre Pekín y Canberra, lo que explica en buena medida el pacto militar Aukus. Pero eso no es todo, también implica incluir a los aliados de Estados Unidos, empezando por la India, que ahora está muy inquieta por lo ocurrido en Afganistán, la efervescencia paquistaní y las intenciones de China en la región…

Sacar las manos de Afganistán y de Irak, es pieza clave en una estrategia muy arriesgada de realpolitik que podría funcionar, pero también es probable que no. China y Rusia eran los principales beneficiarios de una permanencia desgastante, política y financieramente hablando, de Estados Unidos en ambos países y, en cierto modo, las presiones sino-rusas sobre Europa y el Medio Oriente eran una estratagema para distraer a la potencia americana del verdadero escenario en donde se decidirá quién prevalecerá en Eurasia: la franja del Indo-Pacífico…

Comodoro Lalit Kapur

El 21 de abril de 2020, el comodoro Lalit Kapur, uno de los personajes más respetados en la Armada india, publicó su artículo: El enigma del Indo-Pacífico[4], en el cual ya alertaba de no seguir ignorando los planes de China en la región e instaba a formar alianzas regionales para defenderse y pensar en que la participación de Estados Unidos en los mismos fuese muy reducida…

Hoy, el Aukus es una respuesta a aquel llamado del comodoro, pero en un tono más amplio. Ocurre al terminar el acuerdo entre Australia y Francia para construir submarinos de manufactura francesa, y cuando en el pacto se habla de ‘Europa’ en términos de ‘Reino Unido’ en el escenario del BREXIT. El Aukus quiere a una Francia fuera del Indo-Pacífico y más concentrada en la Unión Europea. Todo ello, mientras Úrsula von der Leyen, presidente de la Comisión Europea, acaba de decir que la Unión Europea no debe confiar sólo en el poder de persuasión. Referencia evidente a replantear la OTAN…

La idea es reactivar la unidad y fortalecimiento de Europa continental para hacer frente al Oso ruso, lo que indudablemente pasará por apaciguar toda pretensión separatista, entre ellas las del catalanismo en España. Pero también por las elecciones alemanas para relevar a Ángela Merkel y Úrsula von der Leyen es gente de toda su confianza. Un desequilibrio en Europa sería desastroso para Joe Biden y favorable a los proyectos de Vladimir Putin, más que para los de Xi Jinping…

Al contrario de lo expresado por Hillary Clinton en 2011, ahora se tiene que tratar a China como un ‘enemigo’ al cual se pretende reconvertir si no en ‘amigo’ por lo menos sí en ‘socio’…

Liu Pengyu, portavoz de la embajada china en Washington, firmó el ‘acuse de recibido’: “No deben construir bloques excluyentes que apunten a o perjudiquen los intereses de terceros”. Mostraba el disgusto de Pekín, pero también cierta apertura: lo de ‘excluyentes’ se puede entender como una posibilidad de negociación. De hecho, la India está contemplada como la vía de negociación y contrapeso ante China…

Hasta entonces…

Correspondencia: confinespoliticos@gmail.com


[1] Prefiero traducir ‘think-tank’ como ‘tanque de pensamiento’ que como ‘tanque pensante’, que es una traducción más literal pero demasiado ‘técnica’.

[2] El gran tablero de ajedrez, según la edición.

[3] Foreign Policy, 11 de octubre de 2011.

[4] Center for Strategics & International Studies (CSIS), 21 de abril de 2020.