Vie. Nov 22nd, 2024

¿En las fronteras de otra guerra mundial? – Juan de Dios Andrade

¿Estamos a las puertas de una Tercera Guerra Mundial o ante maniobras de engaño? El riesgo de jugar a la guerra es que realmente terminemos provocando una. ¿Es el revisionismo autoritario el peligro geopolítico del momento? ¿Hay en ciernes una ruptura en la cúpula del poder en Italia?

CONfines Políticos

16 de Febrero de 2023

Globos recolectores de información que son derribados, adjudicándose su origen al gobierno chino, aunque luego se aclaró que sólo estaban seguros del primero. El Pentágono abriéndose a la posibilidad de que dichos objetos voladores fuesen de origen extraterrestre, lo que después fue desestimado. Sin embargo, nada detuvo las especulaciones tanto de los afectos a las teorías de la conspiración como de los amantes del misterio. Antes de eso, el descarrilamiento de un tren en Ohio con sustancias tóxicas, lo que provocó la evacuación en las zonas circundantes…

En el mismo contexto, Rusia inicia una nueva oleada de ataques contra Ucrania, tratando de controlar el Donbás, luego de que se difundiera que Occidente finalmente enviará armamento pesado a las fuerzas ucranianas para hacer frente a la invasión. La negativa inicial de Olaf Scholz no quedará en el olvido porque erosionó la confianza en su sentido geopolítico, debilitó su alianza con el Partido Verde y desembocó en un descalabro electoral socialdemócrata en las elecciones regionales de Berlín, el domingo pasado, a manos de la Unión Cristiano Demócrata (CDU), lo que hace necesaria una coalición de gobierno. Era la repetición de las cuestionadas elecciones de 2021 y el SPD llevaba 22 años sin perder en Berlín…

Geopolíticamente hablando, lo que logró el canciller alemán fue proporcionarle a Vladimir Putin un ‘argumento nacionalista’: equiparar la entrega de tanques Leopard con la batalla de Stalingrado, en un momento en que el gobernante ruso necesita movilizar más gente contra Ucrania. En un encendido discurso por el 80 aniversario de aquel suceso, Putin reivindicó la figura de José Stalin en su guerra contra Ucrania…

Una vez más, la sombra de Stalin gravita en Eurasia y el mundo

El teatro geopolítico

En otro tenor y rayando casi en lo tragicómico, el Banco Central Europeo retomó el tema de expropiar las reservas rusas bloqueadas por Occidente, para solventar los gastos de la guerra, la reconstrucción de Ucrania y las indemnizaciones a las que haya lugar. Por si no bastase con las dudas sobre la ruta legal a seguir, pues podría enviarse una mala señal a todos los que tengan su dinero en las mismas instituciones y latitudes, no se sabe ni el monto total ni en dónde se encuentran exactamente esas reservas. En un santiamén, se ha pasado de 300 mil millones de dólares, dichos al principio, a 258 mil millones, sin que nadie pueda explicar esa diferencia…

Asimismo, el servicio de inteligencia noruego alertó sobre el despliegue de buques rusos con armas nucleares en el mar Báltico. Se trata de la Flota del Norte, que se encuentra en el Ártico y las maniobras navales fueron catalogadas como una amenaza seria para la OTAN, aunque descartan que sean para usar armas nucleares…

Las cosas se tensaron más al ocurrir una oleada de ‘ovnis’ en cielos de Rumania y Moldavia, mientras los ucranianos afirmaron que la nueva escalada de ataques rusos incluye el uso de globos y otros objetos voladores. Fue entonces cuando la segunda decidió cerrar su espacio aéreo y la presidente Maia Sandu denunció un intento de golpe de Estado orquestado por bielorrusos, serbios y montenegrinos, impulsados por Rusia. Según Sandu, el Kremlin estaría usando a grupos criminales y especialmente a la organización Shor, así como al entramado de poder del oligarca Vladimir Plahotniuc, hoy fugitivo. Por su parte, la diputada y vicepresidenta del Partido Shor (Şor), Marina Tauber, convocó a nuevas protestas para el próximo fin de semana contra el gobierno. Moldavia busca integrarse a la Unión Europea junto con Albania, Bosnia y Herzegovina, Montenegro, Macedonia del Norte, Serbia, Turquía y Ucrania…

La guerra como arte del engaño y del sabotaje

Los síntomas vuelven a ser inquietantes. Pero ¿estamos a las puertas de una Tercera Guerra Mundial? En lo personal, no creo que el caso de los presuntos ‘globos espías’ haya sido montado para desviar la atención del descarrilamiento del tren en Ohio. Eso me parece más bien una coincidencia, aunque, claro, sirvió para quitar del centro de atención lo del cloruro de vinilo…

Pero lo que sí debe inquietarnos es que mientras Jens Stoltenberg dio a conocer que la OTAN crea una célula encargada de revisar la infraestructura crítica para evitar sabotajes como el del Nord Stream, se publica el resultado de la investigación del periodista Seymour Hersh en el Berliner Zeitung, donde afirma que Biden decidió destruir Nord Stream porque no confiaba en Alemania (es decir: en Olaf Scholz y los nexos socialdemócratas con los rusos) y ocurre un voraz incendio en un almacén donde se guardaban macetas de plástico en Kissimmee, Florida. Como lo de Ohio, se trata de materiales que, en ciertas cantidades, son letales para los seres humanos y, nuevamente, tuvieron que tomar medidas de protección…

Ojalá que no estemos en la antesala de una guerra de sabotajes…

Todos los días las grandes potencias y las no tan importantes, se espían unas a otras. Hasta Japón ha exigido a China que deje de incursionar en su territorio con objetos voladores. Así que unos globos más o unos globos menos sobrevolando por aquí o por allá, no hace mucha diferencia. Lo que más bien parece estar en juego es cómo justificar ante la opinión pública el aumento en el gasto militar para modernizar los sistemas de ataque y defensa, antes de que China progrese en la materia, no digamos los rusos. Al menos eso es lo que destaca el análisis del servicio de inteligencia de Noruega: los buques rusos en el Báltico son ejercicios de preparación para lo que venga en el futuro…

La expectativa podría también explicar otro asunto que gravita en el escenario euroasiático: los recientes cambios en las estructuras militares húngaras. En un mismo paquete de retiros, Viktor Orban busca deshacerse de los militares de viejo cuño, provenientes de la era soviética, que, aunque ahora sean pocos, no dejan de sentir nostalgia por tiempos ya idos y, con los retiros anticipados, se sacude a los que simpatizan con la OTAN. En pocas palabras, en caso de otra conflagración, Orban quiere tener pleno control castrense con tal de no ser arrastrado por un bando o por otro…

Mao Ning, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China

En todo ello, hay que tener presente que la guerra también es el arte del engaño, como hacen los ninjas, cuyos movimientos teatrales pretenden engañar al adversario y usar al máximo el factor sorpresa. De momento, los aviones de alguien invaden el espacio aéreo de otro y se prenden las alarmas militares. Como acaba de ocurrir el domingo, cuando dos cazas F-35 de los Países Bajos interceptaron a tres aviones militares de Rusia que se acercaban al espacio aéreo polaco…

Obviamente, lo anterior no anula la posibilidad de que alguna de las partes, ‘jugando con fuego’, provoque una guerra a escala global…

Pero eso no es todo. Tal vez haya un aspecto que no estamos observando claramente…

¿Neutralizando una posible Tercera Guerra Mundial?

Esta semana, Robert Ben Lobban Wallace, secretario de Defensa británico, dio a conocer que el 97% del ejército ruso está en Ucrania, al tiempo de solicitar al primer ministro, Rishi Sunak, un presupuesto militar no visto en décadas. Como suele ocurrir en estos casos, aumentan las presiones de los llamados ‘halcones’ tanto en la esfera militar como en la política. Wallace es herencia de Boris Johnson y vamos a ver cuál será la decisión del primer ministro…

Esto es lo que debe inquietarnos: el aumento en el gasto militar de todas las partes en conflicto, incluyendo a Rusia y China, y tengo la impresión de que las potencias que se disputan la preeminencia global se preparan para una posible guerra de mayores alcances, pero, a la vez, tratan de resolverlo desde ahora…

Si es cierto que el 97% del ejército ruso está en Ucrania, como afirmó Wallace, entonces alguien está apostando no a que gane Ucrania, sino a desgastar militarmente a Rusia para neutralizarla como peligro geopolítico para la Unión Europea y poder concentrarse en el Indo-Pacífico. De tal modo que, aunque lo quisiera, Rusia no esté en condiciones de afrontar una guerra mundial…

Ben Wallace, ministro de Defensa del Reino Unido

Hasta ahora, en Ucrania, unos y otros avanzan o retroceden un poco, pero para Rusia significan pequeños logros a un precio muy alto. Contrario a lo que se publica de ordinario, Vladimir está empujando a ganar a la brevedad, porque sabe que dentro de unos meses se fortalecerá la capacidad militar ucraniana. En tanto no llegue el prometido armamento pesado y los operadores no sean debidamente capacitados, Ucrania dependerá de los sistemas de defensa antiaéreos…

Garantizar el buen funcionamiento de la cadena de suministros será la clave para mantener alto el ánimo de los combatientes. Esto explica la insistencia de Jens Stoltenberg en apresurar la entrega del armamento y aumentar la producción de municiones de artillería. Los cálculos de la OTAN y Ucrania indican que creen poder resistir e infringirle fuertes pérdidas a los rusos, chechenos y mercenarios del grupo Wagner, en lo que reciben armamento y equipo, aunque podría no ser en las proporciones esperadas…

Por eso es que Putin ordenó a la Flota del Norte iniciar maniobras. Son para atemorizar a Occidente con la posibilidad de una guerra nuclear, buscando salirse con la suya en Ucrania. Aquí también se insertan las disparatadas declaraciones de Kadyrov, en el sentido de ‘sugerir’ a Zelenski que se pegue un tiro y de estar listo para enviar chechenos a pelear en Estados Unidos si Putin da la orden, igual que los llamados de Lukashenko a los países de la OTSC para unirse a la guerra, mientras Estados Unidos, Canadá y Brasil instaron a sus ciudadanos a abandonar Rusia y Bielorrusia…

Es un mar de presiones en un sentido o en otro, tanto en el terreno geopolítico como en el nacional. Por ejemplo, las afirmaciones del ex primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, culpando a Zelenski de la guerra, poniéndose del lado de Putin y asegurando que él jamás se habría reunido con el gobernante de Ucrania, en lo que fue un claro mensaje para Giorgia Meloni…

Esa estupidez que llamamos ‘orgullo’

No niego la posibilidad de que las partes en pugna estén ‘dragoneando’, pero la historia nos ha demostrado que el orgullo ha sido la causa de incontables desgracias y el orgullo es el orgullo. Sobrevalorar lo que uno es y lo que puede hacer, lleva no sólo a creerse superior a los demás, sino también a falsear la realidad, a colocarse un velo sobre los ojos que te impide ver las cosas tal cual son…

La Primera Guerra Mundial nos demostró hasta dónde es capaz de llegar la estupidez humana, cuando los que pronto iban a empezar a morir a marejadas, se encaminaban al frente de batalla con singular alegría. Como Vladimir en Ucrania, pensaban que la conflagración iba a durar unos cuantos días y que serviría a los jóvenes para ganar fama y fortuna. Nunca hay que creer que de la guerra volverás antes de que se enfríe la cena…

Pero, como auténticos dementes, gustamos de jugar al demiurgo, que, tratando de hacer un bien, provoca un mal mayor…

Del juego de las armas sólo se vuelve con muertos, mutilados y las manos tintas en sangre, mientras los países se hunden en la crisis generalizada y las familias se anegan en el sufrimiento y los resentimientos…

¿Romperá Giorgia Meloni con Berlusconi?

De la Segunda Guerra Mundial aprendimos lo que puede ocurrir si no se detiene a tiempo a un dictador con sueños imperiales. Por naturaleza, los imperios son expansionistas y tras su aparición, los linderos ya no vuelven a ser los mismos. La vida deja ser lo que era y el precio que se paga es muy alto…

Asimismo, ahora sabemos que algunos apuestan a apoyar manteniéndose al margen, para no desgastarse y que sean otros los que paguen directamente las consecuencias, con tal de convertirse en potencias dominantes después del conflicto…

En el fondo, la ofensiva rusa en Ucrania y el teatro montado en torno a una guerra nuclear, son para incidir en la Conferencia de Seguridad de Múnich (CSM), que se reúne desde 1963 y cuya próxima cita tendrá como punto central el desafío ruso al orden mundial y lo que llaman ‘el revisionismo autoritario’…

Hasta entonces…

Correspondencia: confinespoliticos@gmail.com