La noche oscura de Vladimir – Juan de Dios Andrade
No cabe duda que el gobierno de Vladimir Putin se cimbró. Eso no significa que esté liquidado. Pero ¿estamos sopesando realmente las consecuencias de lo ocurrido o vamos a ser tan superficiales como para creer que el problema ha sido neutralizado? En el fondo, Vladimir sabe que, entre el viernes y el sábado, todo cambió y ya nada volverá a ser igual. El impacto no ha sido puramente doméstico, sino también de dimensiones geopolíticas y lo iremos viendo en el transcurso de los próximos meses.